Si te dijera que la mejor relación de pareja es la que muestra tu peor versión ¿qué me dirías? Seguramente pensarías que estoy loco.
En este artículo voy a mostrarte por qué pienso que el propósito de las relaciones de pareja es el descubrimiento de aquello que menos nos gusta de cada uno, para ser conscientes de nuestra sombra.
Decía Karl Jung que aquello que más nos irrita de los demás es aquello que puede llevarnos a un mayor entendimiento de nosotros mismos.
Al mismo tiempo, nos hacen creer que el objetivo de las relaciones de pareja es lograr nuestra mejor versión al lado de la persona que hemos elegido.
Así es como empezamos a esforzarnos por ser más comprensivos y amorosos con la pareja porque eso es el amor. Hacemos esto porque nos enseñaron a asociar el amor con el sacrificio.
Nos decimos: Haré lo que sea para no defraudar a mi pareja y de este modo me aseguraré de que siga a mi lado. Observa que así fue cómo aprendimos a recibir el amor de nuestros padres.
Llega un día en el que no podemos seguir manteniendo esa perfecta versión de nosotros mismos. Entonces gritamos a la pareja: ¡Me sacas de mis casillas!! o ¡Sacas lo peor de mí!!! Y lo decimos desde una profunda sensación de fracaso en la relación.
En este artículo te contaré cómo puedes utilizar a tu favor esa sensación de fracaso para mejorar el concepto que tienes de ti mismo.
Por eso cuando gritamos a la pareja: ¡Me sacas de mis casillas!! o ¡Sacas lo peor de mí!!! Lo decimos desde una profunda sensación de fracaso.
En realidad, la creencia social es que tener pareja es un paseo por las nubes, como aquella película de Alfonso Arau. Al mismo tiempo, como cantaba la Pausini, no somos ángeles caídos del cielo…
Este artículo es el quinto de la serie de seis artículos donde hablo de las tres mentiras del ego y los tres secretos del Espíritu.
Las 3 mentiras del ego
- La gran mentira acerca de las relaciones de pareja felices
- Es falso que tu pareja deba darte el amor que necesitas
- Te resignas cuando dices que es mejor estar solo que mal acompañado
Los 3 secretos del Espíritu
- El gran secreto sobre dónde encontrar a la pareja ideal
- La mejor relación de pareja es la que refleja tu peor versión
- Arruinas tu relación cuando exiges exclusividad
A qué huele tu peor versión.
Uno de los objetivos de las relaciones de pareja es que seas consciente de todo aquello que no quieres ver y que guardas en tu inconsciente sin darte cuenta. Limpiar se traduce en sanar viejas heridas del pasado.
¿Cómo te das cuenta de que tienes que sacar la basura de casa?
Cuando el olor te avisa de que algo huele a podrido en tu cocina.
A menudo, las voces del desarrollo personal quieren venderte perfumes para ocultar eso que hay dentro de ti y que no quieres ver. Como si fuera posible sanar en el presente algo que tiene su origen en el pasado.
Observa si cada vez que te dices que tienes que mostrar tu mejor versión, estás poniendo el foco en los demás.
¿Quiénes, si no, son los que tienen que ver esa mejor versión?
Por eso, cuando no tienes pareja te relajas de ese tremendo esfuerzo por agradar y llegas a la conclusión que tener pareja es un gran trabajo que no te compensa.
Porque tras el esfuerzo esperas un premio del otro como gratificación. Como la bicicleta que llegaba tras las buenas notas en el colegio.
Creemos que para recibir amor tenemos que mostrar nuestra mejor versión, y ser personas calmadas, compasivas, amables y amorosas. Porque eso fue lo que aprendimos en el pasado.
Pareciera que la felicidad estuviera en oler bien, conseguir muchos likes, amigos o seguidores en Instagram.
Como le pasaba a Freddy Mercury en la película Bohemian Rapsody, puedes llenar estadios y al mismo tiempo estar terriblemente solo.
Además te hacen creer que si no sabes controlar esa parte enfadada que se despierta cuando estás en pareja, toda la culpa es tuya.
Quiero decirte que tus partes oscuras y enfadadas merecen tanta atención y cuidado como tus partes felices y brillantes.
En realidad, eso que llamas «tu peor versión» es la forma que tiene tu niño herido de pedir amor y atención.
La adicción al conflicto como justificación de la peor versión de uno mismo.
Quiero aclarar que observar nuestra peor versión en pareja no es lo mismo que justificar la ira que siento ante el otro.
He comprobado que muchas relaciones de pareja están basadas en la adicción al conflicto.
Si este es tu caso, tal vez estás pensando lo siguiente: Como mi pareja me saca de quicio cada dos por tres, eso significa que esta es una buena relación de pareja.
- Cuando piensas de esta manera solo estás justificando tu enganche al sacrificio y el sufrimiento. Es cuando te dices, por ejemplo:
- • No me respeta, pero es un amor con los niños.
- • Nos odiamos profundamente, pero tenemos muy buen sexo.
- • Siento que pierdo mi dignidad y me rebajo continuamente, pero por lo menos sigue a mi lado.
Tienes adicción al conflicto cuando justificas tu peor versión y utilizas la violencia como una forma de cohesión interna para mantener así una relación dañina para ambos miembros de la pareja.
Una pareja que se acostumbra a la violencia como una forma de comunicación es una relación que solo genera frustración, infelicidad y sufrimiento.
En la serie de televisión Big Little Lies, Nicole Kidman tiene una relación de pareja que ha integrado la violencia y la falta de respeto como una forma cotidiana de comunicación. Como después de los ataques verbales y físicos, ambos miembros de la pareja terminan haciendo sexo, pareciera que son una pareja feliz con dos niños encantadores.
Cuando se activa nuestra peor versión en una relación de pareja es como si empezaran a arder las cortinas de la casa de nuestra autoestima. Es decir, las llamas están hablando de una necesidad interna que precisa atención.
¿Qué haces entonces? Porque algo tienes que hacer al respecto antes que de las llamas devoren tu amor propio.
También puedes decirte: Bueno, no es para tanto, solo son unas cortinas. Una vez que sacamos el extintor nos volvemos muy cariñosos como si nada hubiera pasado.
Cuando piensas así, suele ocurrir que solo te das cuenta del verdadero problema cuando ya no queda nada por quemar en la casa de tu autoestima.
Quiero señalar que el conflicto es un síntoma de algo que hay que resolver con uno mismo en la relación de pareja. Puedes ver este video en que te explico por qué doy la bienvenida a los conflictos de pareja.
Al mismo tiempo, el conflicto crónico y permanente está hablando de una relación que está basada en el sacrificio y el sufrimiento. Creo que no hace falta que te diga que donde hay sufrimiento no puede haber amor.
Por ejemplo, tal vez hay un sentimiento de falta de valor que me anima a aceptar situaciones que vulneran el respeto o la dignidad. De este modo la rabia o la impotencia, está mostrando una necesidad de cuidado personal que no estoy satisfaciendo.
Creo que no hace falta que te diga que donde hay sacrificio no puede haber amor, como tal vez te enseñaron en la infancia.
Cuando estoy a tu lado sale lo peor de mi.
Mira, yo era de ésos que acusaban a sus parejas de sacar lo peor de mi. Y esa afirmación, como es normal, automáticamente, confirmaba que la pareja era un fracaso.
De esta manera me libraba de la basura que había descubierto en mí. Como si esa sombra, esa parte oscura, perteneciera al otro y no a mí mismo.
Me ha costado mucho reconocer al dragón rabioso que habita dentro de mí. Al mismo tiempo tengo que decir que ese dragón me lo han mostrado ellas, mis parejas.
Y hoy puedo afirmar que aquellas relaciones que me hicieron morder el polvo, porque me sentía rendido, impotente, desesperado, humillado y anulado, fueron relaciones de pareja que contribuyeron a mi crecimiento y mi desarrollo personal.
Porque esas relaciones me mostraron al Dragón Negro que llevo dentro. Solo entonces pude ser consciente de que las cortinas de mi autoestima estaban ardiendo.
La impotencia, la desesperación o la rabia me avisaron del poco amor que tenía hacia mí mismo. Me avisaron de que tenía una necesidad de cuidado y respeto que no estaba satisfaciendo por mi mismo, y que estaba exigiendo a mi pareja que se ocupara de mis necesidades.
En esos momentos, de mi inconsciente afloraba la sombra, esos registros dolorosos de mi infancia cuando no me sentía valorado ni tenido en cuenta.
Para abrazar mi Sombra y tomar toda su energía y su poder primero tenía que verla.
Por esa razón trabajo con personas que la cagan una y otra vez en sus relaciones de pareja y que no saben cómo trabajar con sus dragones y cambiar sus patrones de conducta inconsciente.
Porque la Sombra se manifiesta a través de esa basura doméstica que solo cuando la aceptamos y reconocemos podemos convertirla en abono fértil para la siguiente relación.
Por qué no tienes que matar al Dragón Negro
Desde pequeñitos nos enseñaron que nuestros dragones eran malos y había que mantenerlos a raya.
Cada vez que aparece un dragón está avisándonos de necesidades que no estamos teniendo en cuenta. Ese es el sorprendente propósito de la rabia.
Si aprendo a reprimir mi enojo perderé la posibilidad de reconocer que no estoy cuidando de mí. El dragón suele aparecer cuando hago a mi pareja responsable de que se ocupe de mis necesidades. Por esa razón convierto la exigencia en una forma de expresar amor.
¿Crees que tu pareja siente que la amas cuando te muestras exigente?
Como he dicho en vídeos anteriores el propósito de las relaciones de pareja es llevar a nuestra mente más allá del concepto limitado y escaso que tenemos de nosotros mismos.
La relación de pareja te ofrece el camino para que descubras el concepto erróneo que tienes acerca del amor y las relaciones. Por eso digo que la relación de pareja es la oportunidad para aprender aspectos de ti mismo que están impidiendo crear relaciones sanas y saludables.
Solo a través de las relaciones personales podemos sanar las creencias inconscientes que nos hacen sentirnos carentes, imperfectos y dependientes.
Necesitamos al otro como espejo para aprender a aceptar lo que menos nos gusta de nosotros mismos.
Por qué tu peor relación de pareja ha sido un éxito
Las relaciones “fracasan” porque se inician por una razón y un propósito equivocados.
(Y digo fracasan entre comillas porque como te diré más tarde no creo que ninguna relación de pareja fracase)
¿Por qué fracasó tu anterior relación de pareja?
Las relaciones “fracasan” cuando pones la atención en el otro antes que en ti mismo.
En realidad, ninguna relación de pareja fracasa. Ya que siempre tenemos a nuestro lado a la persona perfecta para mostrarnos lo que hay en nuestro interior de acuerdo a nuestro nivel de conciencia actual.
Dice Antonio Blay que la vida tiene como consigna actualizar el potencial que uno trae consigo. Este potencial esta constituido por tres cualidades básicas que son la energía, la inteligencia y la afectividad.
La vida siempre nos va a poner delante a través de nuestras relaciones de pareja aquello que necesitamos aprender para lograr esa actualización de la que habla Antonio Blay.
Y lo va a hacer de tal manera que podamos entender su mensaje.
Lo que nos enseña el malestar
A veces, la única forma que tenemos de aprender acerca de nosotros mismos es el malestar.
Esto no quiere decir que tengamos que sufrir para aprender. O que debamos aceptar que cuanto más me sacrifico por el otro más le estoy amando.
Al mismo tiempo, cuando el malestar profundo aparece es porque no hemos sabido escuchar nuestras emociones más sutiles y que han aparecido con anterioridad.
Hay un máxima que dice: Lo que no aprendes por discernimiento lo aprendes por sufrimiento.
Por eso nos sentimos atraídos por unas personas y no otras. Porque en cada momento tenemos un nivel de conciencia diferente y nos sentiremos atraídos por aquellas personas que activan nuestro aprendizaje en cada etapa de nuestra vida.
De esta manera, siempre estará a nuestro lado la persona que va a mostrarnos eso que rechazamos de nosotros mismos, bien porque no nos gusta, o bien porque nos causa dolor reconocerlo.
Es posible que no te des cuenta, pero solo vas a sentir atracción hacia aquella persona que activa tu aprendizaje.
Y el primer paso del aprendizaje para lograr tu realización personal consiste en reconocer al Dragón Negro de tu Sombra.
De esta manera la Mente se va sentir atraída hacia aquellas personas que tienen la llave de esa gruta donde tienes encerrada a tu peor versión.
El resultado de la relación no es lo importante. Lo importante es el aprendizaje que te llevas a través de tu vivencia en pareja.
¿A qué juego estabas jugando en tu última relación de pareja?
La mayoría de las parejas eluden los conflictos, no los resuelven, o los ven como algo muy negativo. Creen que el conflicto es un síntoma de que la relación no va bien. A mi me pasaba eso continuamente en mis relaciones de pareja. Por eso huía del conflicto como una forma de negar el problema.
Creo que, de forma inconsciente, negaba el problema para no ver mi sombra dentro de mí. De ese modo negaba la posibilidad de conocerme y crecer dentro de la relación.
Tu forma de encarar el conflicto te dice si estás jugando a tener razón o jugando a ser feliz en la relación.
Cuando juegas a tener razón, los conflictos erosionan la relación. Y juegas a tener razón cuando cada uno quiere prevalecer su criterio sobre el otro.
Por ejemplo, cuando hay agresiones, cuando aparece la ira, y cuando hay acusaciones mutuas y sentimientos de culpa e indignación.
Te confieso que la reactividad ha sido la situación emocional que más veces ha estado presente en mis relaciones de pareja pasadas. Reconozco que la impaciencia y la impulsividad siempre han gobernado mi carácter.
Por lo tanto, mis relaciones pasadas estaban centradas en mí mismo antes que en el nosotros. Me resistía a abandonar el territorio del yo cuando estaba con el otro.
Es decir, el Dragón Negro tenía el control de la situación en todo momento.
La ira es mi emoción atávica más natural y la que menos expreso.
Es verdad que en mis relaciones de pareja nunca he dejado espacio para la ira. Cuando la sentía llegar la bloqueaba porque no debía sentir un pecado capital.
De este modo negaba la existencia de mi Bestia Negra porque creía que con negarla el Dragón desaparecería.
Al mismo tiempo me equivocaba, porque el Dragón siempre estaba al acecho a punto de saltar. Yo era un adicto al conflicto.
Sin embargo, ahora puedo decir que la ira es energía de vida para mí.
Antes confundía ira con agresión porque a fuerza de reprimirla transformaba mi ira en violencia.
Ahora reconozco que la ira me ha enseñado a marcar límites y a protegerme de relaciones dañinas.
Por lo tanto, la ira forma parte de mi Sombra y cuando abrazo esa ira y la integro en mi experiencia, la ira se transforma en energía de vida.
Transformar juntos la Sombra
Los elementos de la sombra son aquellos aspectos o cualidades nuestras que están guardadas en la oscuridad y proyectadas en el otro.
Cuando no podemos abrazar el conflicto pensamos que esos elementos de sombra no nos pertenecen, sino que forman parte del otro.
Ocurre que en las relaciones íntimas es donde con más fuerza emerge nuestra sombra.
En cambio, cuando juegas a ser feliz en tu relación de pareja le das la bienvenida al conflicto porque su presencia permite crecer y prosperar en intimidad profunda.
¿Para qué sirve entonces el conflicto?
Para ser más conscientes de nuestra Sombra.
Cuando piensas que la causa de tu malestar está en el otro no asumes la responsabilidad de tus sentimientos.
Al mismo tiempo, cuando te haces responsable de tus sentimientos, el conflicto se hace más visible. Es cuando el Dragón hace acto de presencia para que puedas verlo.
Y ahora que tienes un conflicto con una nueva pareja tienes la oportunidad de observar lo que te ocurre por dentro. Ese profundo sentimiento de malestar trae un mensaje para ti.
Por lo tanto, para alcanzar una intimidad madura en la relación de pareja es esencial trabajar con nuestros dragones negros desde la compasión y la confianza para, de este modo, aceptar las sombras, amarlas y transformarlas juntos.
¿Has sido alguna vez consciente de tu sombra?
Respóndeme en los comentarios.
Claves de este vídeo
Cuáles son las claves de este vídeo:
La primera clave es que aquello que nos irrita de nuestra pareja es aquello que puede llevarnos a un mayor entendimiento de nosotros mismos.
La segunda clave que eso que llamamos nuestra peor versión es la forma que tiene nuestro niño interior de pedir amor y atención.
La tercera clave es que observar tu peor versión no es lo mismo que justificar la ira que sientes ante el otro. Muchas relaciones están basadas en la adicción al conflicto cuando se justifica la violencia como una forma de huir de la soledad y mantener una relación dañina para ambos miembros de la pareja.
La cuarta clave es que cuando estamos en pareja, desde nuestro inconsciente aflora lo que Jung llamaba la Sombra, es decir, esa parte de la mente que almacena los registros más dolorosos de la infancia.
La quinta clave es que ninguna relación de pareja fracasa. Ya que siempre tenemos a nuestro lado a la persona perfecta para mostrarnos lo que hay en nuestro interior de acuerdo a nuestro nivel de conciencia actual.
La última clave es que cuando piensas que la causa de tu malestar está en el otro no asumes la responsabilidad de tus sentimientos.
Hola Francisco,
hace poco inicié una relación, con una mujer maravillosa, pero q pasó x mucho abandono desde la niñez, ya en su etapa adulta afrontó decepciones de rechazo y abandono de sus parejas, yo llegué a su vida hace poco. Pero ya nos conocíamos desde hace mas de 10 años pese q no tener mucho contacto.
Ella en esta etapa de la relación constantemente me dice q siempre saco lo peor de ella, yo quisiera encontrar la manera de entender mejor el porque saco esa versión suya…
Muchas gracias…
En realidad, es imposible que nadie pueda sacar lo peor de nadie.
No eres tú quien saca la peor versión de tu pareja. Eso no es posible.
Tú lo único que haces es mostrarle al otro esas heridas inconscientes que arrastra del pasado. Y cuando la pareja se hace consciente de esas heridas se revuelve contra ti por haber despertado sus demonios internos.
Sin embargo, la pareja prefiere acusarte a ti de sacar lo peor de sí misma.
Recuerdo a una amiga que iba buscando un espejo que no la hiciera sentir que estaba gorda. Ella odiaba los ascensores con espejos.
Ningún espejo me gusta, decía entre risas. Todos dicen la verdad. Tengo que adelgazar.
La pareja es ese espejo que nos muestra aquello que no queremos ver. Y antes de reconocer esa verdad interna, es menos doloroso acusar al otro de sacar lo peor de uno mismo.
¿Por qué?
Porque mientras acuso a la pareja de ser un mal espejo, dejo de asumir la responsabilidad interior de mis propias emociones.
En una relación de pareja, el otro activa heridas emocionales inconscientes que ya estaban en nuestro interior antes de que la relación hubiera comenzado.
Luego, cuando la pareja activa esas heridas, creemos que la causa de nuestro dolor está en el comportamiento del otro, pero eso solo es una proyección.
Siempre es más fácil acusar al otro del daño que sentimos que asumir la responsabilidad de nuestra propia sanación.
Dices que te gustaría entender mejor el por qué sacas esa versión suya…
No sé si piensas que, tal vez, seas la causa de que su pareja se comporte de esa manera.
A menudo cuando la pareja nos dice esto sentimos culpa y nos gustaría cambiar y que la pareja dejara de mostrarnos su peor versión.
Sin embargo la causa de nuestro comportamiento nunca está en la otra persona.
Nunca.
Y puede ser molesto, o desafiante reconocer esta verdad.
Tal vez podrías preguntarte:
¿Qué pasa conmigo cuando mi pareja me dice que saco su peor versión?
¿Me hace sentir culpa? ¿Me siento imperfecto? ¿Creo que tengo que hacerme responsable de su bienestar? ¿Tengo que sacrificarme para que siga a mi lado?
En cualquiera de estas cuestiones, tienes el poder de decisión y acción, porque son asuntos que tienen que ver consigo mismo.
Solo podemos trabajar con los asuntos que son de nuestra incumbencia.
¿De quién es asunto que el otro saque, o no, su peor versión?
Del otro, exclusivamente.
¿Te imaginas una relación en la que tú eres el responsable del bienestar emocional de tu pareja?
Por lo general, elegimos aquellas relaciones de pareja que activan nuestras heridas emocionales para que podamos ser conscientes de ellas y así poner los medios necesarios para poder sanarlas.
De otro modo sería muy difícil que nos diéramos cuenta de que aún tenemos heridas sin atender.
La pareja nos ayuda a ser conscientes de lo que no podemos ver por nosotros mismos.
Hola,sali de una relación muy larga. Tras conocer a varias personas, comencé una relación seria con una persona. Al principio genial(como todos),después comenzaron los problemas. Una separación temporal y volvimos con la relación. Yo soy una persona con un dragón negro(bastante fuerte) y el también lo tiene aunque prefiere estar «tranquilo», entiendo su postura de querer tranquilidad,aunque no la comparto,ya que hay momentos en los que aparece ese dragón y tenemos que trabajar la relación. Yo hice sesiones con una psicóloga,y me ayudó mucho,aunque tengo un camino muy largo por recorrer. Ahora siento que el pasa de todo y cuando se me acumulan las cosas,exploto. Si tenemos una discusión,la culpa es mía porque según él,no me gusta como es,y el cree que el problema lo tengo yo. Pienso que debería mirar un poco hacia su interior y admitir ciertas cosas.Al final termino escapando de la situación y de muy mala leche.
María, la relación de pareja es un laboratorio de autoconocimiento individual. No estamos en pareja para descubrir los errores del otro, sino para hacernos conscientes de los propios.
Una vez que nos hacemos conscientes del dragón, podemos tomar acciones concretas para encontrar nuestra felicidad y bienestar. Y ese camino siempre consiste en dejar de mirar al otro para empezar a mirarse uno mismo.
Muchas gracias, por compartir tu experiencia.
Un abrazo,
Hola te go una relación hace 8 años tenemos.una hija y cada uno una hija anterior de otras relaciones, funcionamos muy bien los 5 como familia ensamblada pero cada tanto tenemos peleas muy duras con gritos, agresiones verbales, tiramos o rompemos cosas y estás peleas en ocasiones cuando se salen de control, nuestras hijas no son un límite hasta q las vemos desbordadas de llanto al igual q nosotros. En este momento, nos encontramos separados pero a mí realmente me interesa encontrar el punto en el q pueda resolver estas situaciones ya q sentimos amor.obviamente xq compartimos mucho juntos funcionamos realmente tamb como pareja pero estás peleas claramente reflejan que algo en nosotros no está bien y yo quiero encontrar esa sombra para trabajarla… Cuando tenemos un desacuerdo yo siento que el me pincha hasta que saca lo peor de mi y cuando logra sacarlo comienza a usar frases como cálmate, o por q levantas la voz, y todo se eleva hasta q terminamos diciéndonos cosas hirientes y demas
Querida Noelia.
Iniciamos las relaciones con un concepto equivocado acerca del propósito de las relaciones de pareja.
En realidad, la relación de pareja es el mejor camino para ver esa sombra de la que habla. Tal es así que sería imposible verla si no estás en pareja.
Por lo tanto, quiero agradecerte tu honestidad y valentía a la hora de enfrentar tus sombras, esas partes con aspecto de demonios que nos devoran por dentro, tanto si estás en pareja como si no lo estás.
Al mismo tiempo, cuando la pareja te muestra lo peor de ti, tienes la oportunidad mirar debajo de la alfombra, y tener el coraje de sanar ese dolor.
Me dices que la relación funciona como pareja y que sientes amor ya que comparten mucho juntos.
En primer lugar diré que la causa del conflicto no está en la relación de pareja. Y esto que digo es una buena noticia.
¿Si fuera posible solucionar el problema estarías en disposición de poner todo de tu parte para evitar la ruptura?
Aquí surge el eterno conflicto acerca de quién tiene que poner de su parte para resolver el problema.
Al mismo tiempo, ¿Crees que tomar la decisión de ocuparte de tu propia sanación interna depende de que el otro tome la misma decisión?
En realidad, la relación lo único que hace es mostrar la herida inconsciente de cada uno de los miembros. Y solo podemos ocuparnos de nuestras propias heridas emocionales.
Nadie puede sanar una herida que no es capaz de ver.
Al mismo tiempo, creer que la causa está en la relación puede llevar a la conclusión de que terminando la relación se podría acabar con el problema.
Imagina que tienes una herida en una mano. Cada vez que tu pareja te agarra la mano tú pones el grito en el cielo.
¿Dónde crees que está la causa de tu dolor?
Se suele creer que la causa está en la persona que activa la herida, porque el dolor solo aparece cuando la pareja te agarra la mano.
Una solución sería alejarse de la pareja, o ponerse un guante de acero y evitar que nadie pueda tocarte la mano eligiendo vivir así en una aparente soledad deseada.
Sin embargo, esta solución solo retrasaría el inevitable trabajo de indagación interna que cada miembro de la pareja debe hacer por sí mismo.
Si no estás en disposición de hacer ese proceso de sanación, probablemente se buscará el final de la relación de pareja para evitar tanto sufrimiento.
Al mismo tiempo, la herida que ya estaba antes de que conocieras a tu pareja, no se sanará con la ruptura. Además seguirá estando cuando conozcas a la siguiente (si es que llegas a conocerla)
Quiero decirte que mantengas la esperanza en recuperar la armonía en tu relación.
Conozco muchos casos de éxito y para lograrlo solo se necesita una pequeña dosis de buena voluntad iniciar la aventura de la sanación de las heridas inconscientes de la infancia.
Porque el objetivo del proceso no es salvar la relación sino preservar tu propia armonía interior para llegar a ser la mejor persona, la mejor madre y el mejor padre y también la mejor pareja.
Y porque solo desde esa armonía interior podremos crear una verdadera relación consciente de pareja.
Gracias por tu consulta. Un sentido abrazo.
Hola Francisco estoy trabajando mis heridas de la infancia siempre me he interesado por el desarrollo humano pero jamás me había sentido tan certera con tu información llegue a aquí porque después de un año y medio decidí salir con alguien el me interesa mucho llevamos dos meses saliendo pero hemos tenido conflictos y yo ante eso siempre me alejo nunca se pedir perdón y con el lo estoy aprendiendo todo lo solucionamos y hablamos bien aunque me cuesta mucho sus actitudes me hacen sentir abandono o que no soy suficiente lo que no se es si continuar y seguir sanando y siendo consciente a su lado o alejarme y ocuparme de mis heridas yo sola, me moleste y me aleje pero no se si hice bien pues aun no tenemos una relación.
El objetivo de las relaciones de pareja es descubrir aspectos de nosotros mismos que en soledad nunca hubiéramos podido conocer.
En ese sentido, el otro activa nuestras heridas inconscientes de abandono, o de traición porque nos sentimos insuficientes a su lado.
Ten en cuenta que esas heridas ya estaban en ti antes de conocerlo. Esta persona solo las está despertando para que seas consciente de ellas y puedas hacer algo al respecto.
A menudo, hacernos conscientes de nuestras heridas emocionales nos causa mucho sufrimiento y no siempre tenemos la energía suficiente para sanarlas en compañía de otra persona. En este caso te animo a pedir ayuda profesional.
He comprobado que aquello que no sanamos en una relación de pareja, tendremos oportunidad de sanarlo con la siguiente.
Un abrazo,
Hola, la verdad es que me he sentido muy identificada y pensaba que era la única. Tengo una relación a distancia por motivo de la pandemia, nos conocimos antes, pero ahora vernos se hace muy difícil por las restricciones, aunque estamos a hora y media de distancia. Yo me consideraba una persona pacífica, fácil de tratar, jamás he tenido problemas o peleas con colegas de trabajo, amigos o familiares, en todos los ambientes que me ha tocado desenvolverme siempre me llevado bien con la gente y creo que nadie puede decir que soy una persona conflictiva, sé que tengo mis defectos, claro, como todos, pero de andar peleando con la gente no soy. Sin embargo con mi pareja no es así, siento que me disgusta todo lo que hace, a aveces me hace enojar, adrede por tonteras, pero yo me enfado muchísimo, y más aún él ya me considera una persona de mal genio, y eso me hace muy infeliz, y me lo recuerda constantemente, a veces es a modo de broma, pero a mi no me hace gracia, al contrario, siento que aumenta mi malestar. Yo se lo he planteado, muchas veces, pero ya un día exploté; él reconoció su error y me pidió perdón. Nos reconciliamos, yo me sentí liberada, pero al día siguiente nuevamente me disgusté por algo que hizo, me sentí ofendida y pasada a llevar. Quiero seguir con la relación, no sé si el problema es la distancia, soy yo, es él, ambos o simplemente debemos separarnos, lo cual obviamente no quiero hacer.
Gracias, Evelyn, por compartir tu experiencia.
La causa del sufrimiento en la relación de pareja está en cada uno, en nuestras heridas inconscientes. El otro, lo único que hace es activar esas heridas con su comportamiento. Por eso nos enfadamos.
Imagina que tienes un moratón en la mano y tú no eres consciente de esa herida. Si tu pareja que toca la herida sientes dolor y, tal vez, tu primera reacción sea acusar al otro: ¡Ay! ¡Me estás haciendo daño!. Entonces la pareja puede decir: No te pongas así. Sólo te he tomado la mano.
Quiero señalar que el enojo me está avisando de que no estoy satisfaciendo mis necesidades. Tal vez es una necesidad de cuidado, de poner límites, de respeto, etc.
Nunca debemos subestimar el enfado que sentimos en una relación de pareja porque siempre está hablando de una necesidad de cuidado que no estamos satisfaciendo.
A veces nos enojamos porque creemos que es la pareja quien debe ocuparse de satisfacer mis necesidades.
Una vez que el enojo me ayuda a ser consciente de que tengo una herida, puedo hacer dos cosas:
O bien tomo la decisión de ocuparme de mis necesidades y sanar la herida por mi cuenta, o bien deposito en mi pareja la responsabilidad del cuidado de esa herida.
En realidad, la pareja nunca va a poder sanar nuestras heridas inconscientes porque no puede verlas y tampoco es su responsabilidad.
La sanación de nuestras heridas inconscientes solo es asunto nuestro.
Una vez que soy consciente de eso, si sigo sufriendo en la relación, tal vez pueda preguntarme por qué estoy al lado de alguien que me ofende continuamente o que no me respeta, o por qué no hago nada para ocuparme de mis necesidades evitando el sufrimiento.
Ten en cuenta que solo cuando sanamos nuestras heridas y nos hacemos cargo de nosotros mismos, podemos tener la claridad necesaria para saber si deseamos mantener o terminar una relación de pareja en la que estamos sufriendo.
Un abrazo,
Que interesante…yo tuve una ruptura inesperada de una relación larga. Como pude ser funcional creía que había afrontado el duelo de manera exitosa….eso es lo que creía..ahora al haber empezado una relación es donde está floreciendo todo, donde realmente soy consciente de las heridas que me causó.
A menudo, Yosmín, evitamos vivir el duelo de una ruptura, o nos decimos que ya lo hemos afrontado como estrategia para no indagar en las verdaderas heridas que la ruptura activó. Indagar en nuestro interior puede causarnos sufrimiento y por eso evitamos adentrarnos donde nos duele. Sin embargo, ese dolor no sanado está esperando ser tenido en cuenta por cada uno. Cuando iniciamos una nueva relación es muy posible que esas heridas no observadas afloren a la superficie para que las tengamos en cuenta. Entonces tenemos la oportunidad de observar aquello que necesitaba ser visto. Es una oportunidad de sanación que nos ofrece la experiencia para lograr nuestra felicidad.
Un abrazo,
Es enserio?? «Hay muchas maneras, aparte de tu pareja, de satisfacer tu necesidad de respeto y valoración.» El respeto y la valoración de la pareja debe ser algo mutuo y básico en una relación sana, no
se puede justificar la falta de este diciendo que es una necesidad emocional que se intenta llenar por carencias emocionales que tenga la persona.
Gracias, Dannae, por tu comentario. Estoy de acuerdo contigo en que el respeto y la valoración de la pareja debe ser algo mutuo y básico en una relación sana. Tal vez no he sabido explicarme mejor. Lo que quiero decir en el post es que no vamos a poder recibir ese respeto y esa valoración si antes no aprendemos a dárnoslo a nosotros mismos sin exigirlo a otra persona. No estamos en pareja para compensar aquello que no sabemos darnos a nosotros mismos.
Un abrazo.
Hola Javier, Actualmente he tenido muchas crisis y ya llevo 5 años en una relación, me he dado cuenta que a traves del tiempo siempre soy yo la que menciona la palabra «terminar», el nunca me ha engañado, y siempre soy yo la que tiene desconfianza, he notado que el ya comienza a perder la paciencia, aun asi no menciona la palabra terminar y las veces que yo lo hago me dice, si no te amara seguiría aquí?, Todo este tiempo no fui consciente de mi problema hasta ahora hace poco, a raíz de una meditación reaccioné y leyendo un libro de victoria cadarzo (Abraza a tu niño interior) comprendí que necesitaba mucha ayuda ya que tengo un trauma de violencia que vivi hasta mis 21 y nunca tuve ningun tipo de tratamiento lo cargué hasta ahora ya con 35 años que he tenido memorias vividas de ciertos momentos y hasta sueños, a veces algo difícil de creer que despues de toda una vida este tipo de cosas aparezca. Ha sido muy difícil, quisiera haberme dado cuenta antes para reconocer la ayuda que necesito, sin trabajo y sin dinero me he dedicado a buscar todos los posibles materiales de autoayuda, mientras espero una posible hora que no se si me la den y tampoco sé para cuándo, solo se que estoy intentandolo lo mejor que puedo para mantenerme firme y luchando, al igual que tu lo mencionas mi relación ha sacado mi peor lado, pero a la vez extañamente un deseo voraz de querer estar mejor y ser mejor. La violencia y el estar sola de pequeña me transformo en una persona solitaria, de baja autoestima, de pensamientos predispuestos a la negatividad, tristeza y emociones a flor de piel, la desconfianza fue parte de toda mi vida hasta ahora.
Siempre al estar en pareja mi dragón aparecía, seguía los consejos de personas poco «empaticas» o que realmente no entendían mi situación»piensa positivo» «mañana será mejor» «ya deja de pensar negativo» «ya deja de victimizarte» pero al final era un circulo vicioso ya que todas esas frases positivas eran momentaneas y no trataban la herida que cargo desde muy pequeña, siempre en algún momento, la crisis llegaba y mis reacciones eran exactamente las mismas, nada mejoraba.
Hoy al fín descrubrí los motivos y estoy intentando no culparme más, siento que di un pasó al descubrir y aceptar la «raíz» del problema y al reconocer que necesito ayuda, sin embargo como la espera esta tomando su tiempo han habido nuevas crisis y siento que me faltan las herramientas para poder cambiar esos patrones.
tengo. Hoy más que nunca quiero poder sanar esas heridas para poder amarme a mi misma, sanar las heridas y al fin progresar y salir adelante.
Gracias por tus mensajes que me hacen ver las cosas desde una perspectiva distinta.
Querida Harriet,
Gracias por compartir tu experiencia de vida.
Se suele decir que el maestro aparece cuando el alumno está preparado. Cada uno tienen un plan de vida y los descubrimientos que uno hace ocurren cuando tenemos la claridad necesaria para verlos. Lamentarse porque no nos dimos cuanta antes no suele ayudarnos a aceptar los hechos. Cada uno hizo lo que pudo en cada momento de su vida. Y si hubiéramos podido hacer otra cosa mejor ¿por qué no lo hicimos? Porque no pudimos hacerlo mejor, Harriet.
La causa de nuestro malestar está en nuestra forma de percibir lo que nos ocurre. Y nuestra experiencia de vida nos enseñó a experimentar las emociones de una determinada manera. Nunca es tarde para darnos cuenta de que existen en nuestro interior heridas que requieren nuestra atención y nuestro cuidado.
Mantener una mirada compasiva hacia nosotros mismos es el mejor regalo que podemos hacernos. Recuerda que dentro de cada uno tenemos un lugar que nos permite observar la adversidad sin sentirnos abrumados por ella. Ese lugar que yo llamo el Self, siempre está contigo. Aunque a veces uno pueda llegar a creer que se ha perdido, Eso que existe dentro de nosotros, siempre nos encontrará.
Un sentido abrazo.
Buenas tardes Javier me gusto tu articulo sin embargo no se que pasa conmigo, mi pareja siempre dice que yo saco lo peor de el y por mas que intento parece que saboteo mi relación para mejorarlas, cosas tan simples que me pide que haga no las hago y siempre le digo que si voy a cambiar que voy a mejorar pero siempre me quedo en mi zona de confort. Lo quiero pero ya no se que hacer parece que somos tan diferentes en todo, el tan activo y con metas en la vida y yo todo lo contrario. A mi me cuesta mucho todo hacer las cosas como comunicarme y decir lo que pienso
Mariana, nuestra pareja nos muestra aquellas partes de nosotros mismos que no queremos aceptar. Cuando acusamos al otro de sacar lo peor de nosotros mismos, estamos proyectando sobre el otro aquello que nos nos gusta de nosotros mismos. La pareja lo único que hace es meter el dedo en la llaga, y tocar la herida inconsciente que ya existía en cada uno antes de conocerla.
Nuestra conducta trata de proteger nuestras heridas inconscientes y nuestras partes vulnerables. Por ejemplo, si tuve que obedecer en la infancia porque tuve padres muy estrictos, voy a tratar de compensar esa sumisión infantil en mi relación de pareja a través de la rebeldía. Si quiero cambiar mi conducta tengo que observar el origen del problema que está en mis creencias inconscientes.
Un abrazo.
Buenas tardes, me gustaría entender lo que pasa conmigo, generalmente las personas me conocen por ser tranquila, pero en cuanto a mi esposo suelo ser todo lo contrario. Ha sido una lucha constante contra mis sentimientos por 6 años pues siempre termino sintiéndome culpable sobre lo malo que pasa en la relación, pues me desespero porque él es demasiado lento y perezoso y nuestra situacion económica se ha vuelto peor, intenté ser un equipo trabajando fuera y dentro del hogar de pero no recibí su apoyo y me sentí defraudada y muy desesperada, hasta lo insulte. Él se fue, pero yo quise regresar después de año y medio pues sentía culpa por mi forma de reaccionar, y aunque ahora estamos juntos no estoy satisfecha con la relación pues no veo un interés mutuo en salir adelante, muchas veces creo que lo único que nos une es la vida sexual. También ahora que estoy con él, vivimos cerca de mi suegra y tampoco la tolero, siento que lo trata como el hijo perfecto y pequeño, sin responsabilidad, quisiera no sentir rabia, pero me es difícil.
Nuestras relaciones de pareja, Fabiola, reflejan nuestras heridas inconscientes. Dices que te gustaría saber lo que pasa contigo y, al mismo tiempo, quieres encontrar la tranquilidad en aquello que ocurre fuera de ti. Para saber qué es lo que te ocurre tienes que hacer un giro radical en forma de U y dejar de mirar fuera y empezar a mirarte a ti misma. ¿Qué es lo que sientes? ¿Qué necesitas? ¿De qué manera satisfaces esas necesidades sin hacerlas depender de tu pareja?
La culpa puede surgir porque nos desconectamos de nuestros sentimientos y necesidades. Tal vez aprendimos que el amor es renunciar a nuestras necesidades y ocuparnos de las necesidades de los demás. Esa desconexión provoca ira y rabia.
Gracias por compartir tu experiencia.
Un sentido abrazo.
Hace un par de meses regrese con mi pareja, después de 3 años de separación, yo lo busque porque es un buen hombre, detallista y cariñoso, siempre dispuesto a escucharme y apoyarme, pero yo no puedo ofrecerle lo mismo, por increíble que parezca si lo quiero, pero la mayor parte del tiempo me siento incomoda o agobiada por pequeños detalles como que le suden las manos al tomarme de la mano o hacerme un cariño y siento que es poco sutil, si sabe que es un problema considero que debería traer siempre consigo un secador para sus manos, en un principio sus llamadas me alegraban, hablábamos por horas pero ahora siento que no tiene tema de conversación, sus llamadas son rutinarias y sin ningún tema más allá de su trabajo y su familia, ahora veo que si yo no hablo de algo diferente el no lo hace, siento que no me aporta nada de interés, y en cierta parte el lo intenta pero sus gustos son tan simples y básicos y yo suelo ser más rebuscada. El es inseguro y torpe y yo me desespero y me estreso y llegó a ser sarcástica… Últimamente lo evito, no le deseo, me aburre pero él sigue haciendo todo para apoyarme y demostrar su cariño, es muy tolerante pero también es codependiente y siento que hace cosas para comprometerme, me llama con cualquier excusa… He llegado al agobio total, lo quiero pero ya no le aguanto, no le quiero dejar pero me gustaría que fuera diferente, más independiente. Estoy confundida y al mismo tiempo temerosa, quiero una relación pero no una romántica y estúpida ni una toxica, quiero una dónde ambos seamos independientes, seguros, alguien con quien hablar de de vez en cuando, no una que me comprometa, una en la cual no sienta que alguien depende de mi. Quiero un complemento no alguien que haga todo por mi, con una vida propia, con decision, sin miedo porque ese yo ya lo tengo desde que me divorcie de mi pareja anterior.
Gracias, Daniela, por compartir tu experiencia.
Es fácil que creer que la causa del malestar que sientes en la relación está en tu pareja. Posiblemente piensas que si a él no le sudaran las manos, si fuera más independiente y atractivo, etc. tú te sentirías mejor.
En realidad, tu pareja solo está reflejando tu estado mental. Te está mostrando aquello que piensas de ti misma y que no eres capaz de aceptar.
Nuestras creencias inconscientes acerca de nosotros mismos solo podemos descubrirlas a través del reflejo en el otro de aquello que no podemos ver porque es inconsciente.
Ten en cuenta que buscamos en una relación de pareja aquello que no pudimos recibir en la infancia. De este modo recreamos los dramas de la niñez y así podemos llegar a comprender aquello que nos pasó y que no pudimos resolver por nosotros mismos porque éramos muy pequeños.
Tal vez podrías preguntarte por qué has regresado tras varios años de separación. Es una manera de poner la atención en ti y no en él. La causa de nuestro malestar nunca está en el otro, sino en nosotros mismos. El otro solo es el efecto (no la causa) de aquello que creo acerca de mí y que aún no he podido comprender.
Si tienes dificultades para comprender cómo funciona la mente y de qué manera puedes acceder a tus creencias inconscientes te invito a ver este vídeo.
https://click.franciscojaviergutierrez.com/1-pagina-de-alta-al-funnel
Un sentido abrazo.
Hola como estas me gustó leer.ucho tu blog y pues me identifico bastante con el tema
Te cuento es un poco larga mi historia.
Mira mi actual parejo y yo nos conocimos por un amigo ella salía con el, yo desafortunadamente me metí con ella poco después ella le terminó a esa persona a y «yo me volví el oficial» pero ella se veía con el la pasaba en el apartamento de ella y lo peor es que yo sabía tu e reacciones muy violentas pero nunca le pegué ni maltrate solo yo le pegaba a las cosas hacia mala cara y me iba a correr en mi moto, bueno paso un poco el tiempo ella quedo embarazada y me fui a vivir con ella cambiamos de ciudad, hay ya estábamos bien tuvimos nuestra hija y retornamos a la ciudad donde nos conocimos seguimos viviendo juntos duramos viene 2 años más ya después ella se quedó son trabajo yo igual y recurrimos a muchas peleas más que todo por mi parte ya que algo me molestaba o disgustaba hacia mala cara a todo el mundo fuera familia de ella o la mía o mis amigos me volví una persona controladora pues yo tenía la contraseña de las redes sociales de ella y pues a pesar de pasar el tiempo yo decía será que me la vuelve hacer y pues solo fingía ante ella que ese tema lo olvide y supere también se dieron esos problemas ya que ella tiene un hijo con otro tipo y pues el aveces le decías cosas de volver nuevas bobadas pero ella nunca reaccionó a eso siempre lo rechazo, bueno en medio de esos problemas un amigo mío perdón ex amigo se fue que vivir cerca a mi casa por que el se sentía solo y todo eso lo invitaba a tomar tinto hay se empezaron a formar más problemas con mi pareja ya que el le ofreció trabajo como modelo webcam yo no estaba de acuerdo me volví más tóxico a toda hora la llama me pagaba el celular yo entraba a las páginas que ella trasmitía y le peleaba por ese medio ella ya me decía mentiras el siempre la llevaba y la traía el caso las peleas llegaron al punto de gritar nos tratarnos mal y ella me cachetada yo lo único que hacía era cogerla de la cintura y decirle hablemos pero aún así nada llego el caso que descubro mentiras de ella me decía que iba a entre listas ella iba a verse con el mi disque amigo bueno nos separamos yo me quedé con la bebé resultó que en menos de una semana de separarnos ella estaba viviendo con mi disque amigo bueno al mes ella me empezó s buscar arreglar las cosas listo yo le correspondi y ella se fue a vivir sola como a las 15 resulta que ella volvió hablar con el tipo y a verse yo me enteré al mes los confronte ella lo dejo de lado nuevamente dice la teoría y otra ves me la lleve a vivir conmigo en medio de eso el tipo creo cuentas falsas para hablar con ella ya que nuevamente yo tenía todas las redes de ella, pero no sospeché ya que el creo un perfil falso de mujer, bueno resulta que después ya ella cambió la clave a las redes a celular le armé problema bueno dije confiemos en ella resulta que se volvió a ver con este tipo y estar en la casa de el sacando la escusa que debía ir a trabajar temprano irónico no ? Bueno me pidió perdón que si quería sacarla yo estaba en el derecho me dijo yo listo depende de ud arreglar las cosas ella me dijo bueno pero desde que volvimos yo armo problema por que si y por que no, no confío en ella, aveces me pregunto por que volví con ella, que espero de ella, la verdad cuando no se nada de ella no me contesta o salía sola me daba esa ansiedad de estar encima de ella que hace que no hace con quien habla le peleo por que ya llega al punto que casi no tenemos relaciones y en medio de esas peleas le vi vídeos del tipo cantandole y yo mismo los borré peleamos al punto que literal ella me destrozó la cara y aún así digamos que la perdone pero la verdad todo me disgusta, muchas veces no me siento cómodo realmente no soy feliz no e olvidado todo lo que me hizo aveces yo mismo me digo que debo conquistarme pero a la hora de tratar de hacerlo no me nace a ratos soy grosero con ella soy tosco soy poco expresivo soy poco detallista peleamos mucho delante de quien sea yo sigo haciendo maña cara porque si no por que no tengo problemas con ella y le hago mala cara a todo el mundo muchas veces siento que ella debe pagar lo que me hizo que me debo desquitar pero a la hora de separarnos yo vuelvo a caer a buscar a yo pedirle perdón a yo decirle que voy a cambiar yo me siento inseguro de mi mismo muchas veces siento ganas de llorar me siento solo, siento que ni yo mismo me quiero, siento ganas de acabar con mi vida, pero no lo hago delante de nadie, por mi parte nadie la quiere a ella mi familia nadie dicen que ella es la causa de mi ruina, pero no se por que nunca la dejo ir no se por que ella sigue a mi lado y yo al de ella si los conflictos míos hacia ella me abundan como te digo le peleo por que si por que no ppor si tal vez y ella me dice que igual esta aburrida de mis actitudes
Gracias Julián por compartir tu experiencia.
Hay mucho dolor en la historia que me cuentas. Cuando no hemos sanado nuestras heridas de abandono y traición de la infancia solemos repetir, sin darnos cuenta, esas situaciones de traición y abandono con nuestras parejas.
Cuando no somos conscientes de nuestras heridas creamos relaciones de pareja en las que hay mucho dolor y sufrimiento. Y seguiremos sufriendo hasta que no pongamos los medios necesarios para sanar esos patrones de comportamiento controladores o violentos.
En este sentido vamos a creer que la causa de nuestro dolor está en el comportamiento del otro. En realidad, el otro solo activa nuestras heridas inconscientes de traición y abandono que seguramente vivimos en la infancia.
Me dices que no sabes por qué nunca la dejas ir o por qué ella sigue a tu lado. Esto es así porque habéis construido la relación desde un sentimiento mutuo de carencia y escasez afectiva. Es posible que, a pesar del dolor, cada uno crea que el otro tiene lo que necesita y que aún puede cambiar y hacerle feliz.
Una relación de codependencia es la de dos palomas atadas por una pata: suman cuatro alas, pero no pueden volar. Lo intentan pero no pueden, y al mismo tiempo dañan al otro.
Te invito a que pidas ayuda profesional para detectar y corregir esos patrones de conducta que solo causan dolor y sufrimiento.
Un sentido abrazo.
Hola Javier!! Me gusta el artículo ,yo sé que tengo un dragón negro que saca mi pareja ,luego me arrepiento mucho pero es que me lleva a límites insospechados,lo insulto y le digo cosas horribles,yo nunca he sido así con nadie ,pero él me lleva al límite de mi ser,me siento infravalorada , constantemente criticada y comparada entonces estallo y no puedo controlar la ira que me invade y lo insulto de la peor manera, he llegado a un punto en que tuvimos una pelea muy mala por una tontería ,yo en verdad no estaba enfadada en la pelea sólo un poco molesta pero él dijo algo una vez más para infravalorarme y me volví loca totalmente, después le pedí perdón pero sinceramente ese dragón negro que salió de mí ,no fue el mismo ,no me arrepentí a pesar de las malas cosas que le dije ,no fue como otras veces que lloraba y le pedía perdón desconsolada,me dió igual en el fondo.
No sé si sea algo bueno o malo pero estoy harta de que no se me valore como merezco.
Puedes preguntarte, Irene, qué me está reflejando mi pareja cuando me siento tan enfadada con él.
La pareja nos está reflejando aquello que creemos acerca de nosotros mismos.
A menudo, la ira surge porque estamos exigiendo a nuestra pareja que se encargue de satisfacer nuestras necesidades al mismo tiempo que nosotros dejamos de ocuparnos de nosotros mismos. Hay muchas maneras, aparte de tu pareja, de satisfacer tu necesidad de respeto y valoración.
Un sentido abrazo
Hola Francisco, gracias por tu post, yo llevo meses sintiendo mis sombras con mi pareja y no me gusta la persona en la que me estoy convirtiendo. (lloro muy seguido, muy orgullosa, extremista, etc) Te quiero hacer una pregunta, hice un análisis en mi, y se que hay muchas cosas que proyecto que no me gustan de mi y las veo en él. Las he tratado de manejar, pero yo no veo una mejoría. Cómo se si es que realmente la relación no funciona más y entre los dos la estamos forzando o si sigue siendo un problema mio personal. Te lo digo, porque llega un punto donde no disfruto de la relación pero quizá dos o tres días después se me pasa…
Gracias Karen, por tu pregunta.
Cuando la idea del sacrificio llega a una relación de pareja el amor ha desaparecido.
En realidad, la relación de pareja solo refleja nuestros conflictos personales a través de la proyección de nuestras sombras.
Cuando se integra el conflicto permanente como una parte más de la relación, nos volvemos adictos al malestar y al sufrimiento. Experimentamos picos de malestar que luego desaparecen hasta la siguiente fase de máxima tensión y vuelta a empezar.
Una relación de este tipo no es una relación sana de pareja y es responsabilidad de cada uno mantener o evitar una situación tóxica que daña nuestra autoestima.
Un sentido abrazo
Hola Francisco estaba en una relación en donde empece a dejar que me sintiera menos que el, insegura, celosa, desconfiada, con mucha ira porque me sentía ignorada, y finalmente termino en una escena violenta por mi parte con mucha agresión verbal y bueno choque su coche, aun no me persona esa actitud tan pésima de mi, y siempre me decía que yo era muy débil emocionalmente y me hacia sentir celos y desconfianza, y pues así terminamos, estoy muy confundida aun, no me gusta esa persona que descubrí que soy a su lado.
Gracias
La finalidad de la pareja, Claudia, es precisamente que descubramos quiénes somos realmente. Por lo general vivimos identificados con nuestras máscaras que ocultan nuestras heridas inconscientes.
Es decir, la pareja me refleja aquello que no soy capaz de ver por mí mismo.
Por ejemplo, tal vez una parte de ti cree que para estar al lado de un hombre tienes que sentirte menos que él. Esta parte se manifiesta en tus celos e inseguridades. Si no aprendemos a ver lo que nos está pasando, todo ese malestar reprimido puede desembocar en una actitud violenta.
Cuando tenemos creencias inconscientes que nos desvalorizan existe mucho dolor en nuestro interior porque nos estamos castigando a nosotros mismos. Entonces aparecen pensamientos que critican nuestra actitud sumisa y nuestra debilidad emocional y que nos invitan a poner límites a esa situación. Muchas veces esos límites se manifiestan de una forma extrema que luego nos hace sentir culpables.
Se trata de observar todas nuestras creencias sumisas y agresivas y luego comprender por qué nos invitan, primero, a obedecer y, luego, a atacar.
Todo este proceso de indagación interna del que te hablo tiene como finalidad comprender lo que ocurre en nuestros interior para alcanzar la paz y el equilibrio.
Te invito a ver este video donde te muestro cómo puedes trabajar con tus creencias inconscientes.
https://click.franciscojaviergutierrez.com/1-pagina-de-alta-al-funnel
Un abrazo
Hola..acabo de leer su artículo..estoy pasando por un conflicto con mi pareja hace bastante tiempo ..aveces siento que los dos tenemos dos personalidades…la que se ama y la que se odia …el por un lado saca su ira verbalmente ..sabe tocar mis puntos de explosión…y yo reacciono físicamente…estamos en el puto más álgido y nos odiamos ..pero horas después solo queremos estar juntos …en todos lados leo que somos tóxicos…que debemos alejarnos…( tenemos u hijo en común) pero siempre encontramos la forma de volver a buscarnos.y seguir con estas pasiones desatadas que ya parecen una adicción…me atrajo este artículo xq plantea un punto de vista diferente
Gracias, Edith, por compartir tu experiencia.
Tal vez mi artículo plantea un punto de vista diferente, pero de ninguna manera justifica una relación conflictiva.
La adicción al conflicto fortalece nuestra identidad de seres escasos y carentes de amor.
Por lo tanto, esa adicción define una relación de pareja tóxica.
Al mismo tiempo tienes que tener en cuenta que el amor no es sufrimiento.
En una relación de codependencia no hay amor, solo hay miedo a la autonomía y la independencia.
Puedes preguntarte, por tanto, por qué sigues en una relación de pareja donde no hay amor sino miedo y sufrimiento.
La finalidad de la relación es descubrir mis creencias erróneas acerca del amor y la pareja. Creencias como que el amor de pareja es una montaña rusa emocional.
Recuerdo que en la serie de televisión Big Litle Lies, Nicole Kidman terminaba teniendo sexo con su marido después de cada violenta discusión, incluso con maltrato físico.
Cuando no eres capaz de ver las creencias inconscientes que tu pareja está reflejando acerca de ti misma se pierde el propósito de la relación de pareja.
Es entonces cuando caemos en una espiral de dolor y sacrificio.
Recuerda que dos palomas unidas por una sola pata suman cuatro alas pero no pueden volar.
Un abrazo.
Hola Francisco voy encontrando tus videos y blogs, gracias por tan sabias palabras, hace dos años termine una relación de 5 años, hace 7 meses que ya me siento tranquila, concientes, trabajando con mi sombra, lo que veo en mi es que me está dando miedo volver a tener pareja no confío veo lo malo, no me gusta por qué siempre he creído en el amor como puedo trabajarlo mejor, gracias !!!!
Hola Iliana.
Cuando sentimos que tenemos miedo a tener pareja tras una ruptura dolorosa, estamos evitando repetir esa situación de conflicto.
Cuando piensas que siempre has creído en el amor, puedes preguntarte si aún piensas que el amor de pareja va a darte la felicidad.
La finalidad de la pareja no es encontrar la felicidad al lado de la persona perfecta.
Enamorarse implica aceptar el conflicto como una vía para reconocer e integrar nuestras propias sombras.
Un sentido abrazo,
Francisco sigo hace tiempo tus blogs. Y siempre encuentro en tus palabras luz para entender lo que me pasa. Hace un año terminé una relación muy conflictiva, en la cual me sentía no querida, abandonada, insegura. Y mí reacción siempre fue el reclamo y la ira ante conductas u omisiones que en mis creencias las daba por hechas en cualquier relación, y sin embargo no existían. Terminamos con una gran discusión, con mucho dolor y sin volvernos a dirigir la palabra. Y el tema es que hoy estoy empezando una nueva relación, y los fantasmas del rechazo y abandono rondan cada vez que mis expectativas no se cumplen. Me pregunto a cada momento porqué estoy con alguien que se de antemano que no me va a dar eso que mí mente dice que necesito. Será que lo que necesito realmente no es lo que pienso? Te mando un abrazo
Muchas gracias, María, por compartir tu experiencia.
Cuando nos preguntamos acerca de nuestras conducta estamos iniciando el camino del cambio. Darnos cuenta de que nuestra forma de actuar no está acercándonos a nuestro destino es el primer paso para lograr nuestras metas.
Dice Matilde Garvich que en una relación de pareja damos lo que recibimos en la infancia y pedimos aquello que nos faltó recreando viejos traumas del pasado.
La mente cree que una pareja va a ofrecerte aquello que no recibiste en la infancia, por eso vas a busca relaciones que van a permitirte activar de nuevo tus demandas infantiles. Si sentiste que no te dieron atención y amor, la mente va sentirse atraída hacia personas distantes o evasivas que te van a hacer sentir lo mismo que sentiste en el pasado.
Este comportamiento es totalmente inconsciente y solo es posible cambiarlo a través de un proceso de indagación interno.
Un abrazo
Gracias Francisco por enriquecernos con tan valiosa información. Yo me divorcie hace 5 años, y hoy por hoy puedo decir que el padre de mis hijos ha sido una de las mejores escuelas de vida que he podido tener. El lograba sacar esas sombras y esos dragones que confieso que para ese entonces no entendía lo que el me hacia sentir cuando me encendía en cada discusión. Después de recorrer un largo camino lo perdone, me perdone y al fin logre entender sin juzgarme, que a veces actuamos según nuestro nivel de consciencia. Entendí que no existen las victimas ni los victimarios, que atraemos a nuestras vidas lo que queremos vivir de manera hasta inconsciente. El trabajo interno es arduo, pero la satisfacción y el gozo que se siente cuando logramos superarnos a nosotros mismos día a día no tiene precio; Aun no he logrado concretar una relación de pareja con una conexión genuina, sigo trabajando en mi, Gracias infinitas.
Gracias por compartir tu historia.
Has expresado muy bien, en base a tu experiencia, el trabajo interior y el progreso que nos permite hacer una relación de pareja.
Me dices que aún no has encontrado una relación de pareja con una conexión genuina.
Nuestra experiencia de vida nos está mostrando aquello que creemos acerca de nosotros mismos y en cada brizna de malestar hay un aprendizaje.
Un sentido abrazo,
Sí siempre dije que el saca lo peor de mí sí tengo mis dragones negros ira, orgullo,impaciencia,resentimientos, rencores que en 15 años fuí puliendo y aceptando que son mios y mi pareja solo los saca a flote trato de mejorar cada día en mi persona y perdonar y de hacerme cargo de mis mambos sin hecharle la culpa a nadie grácias por este post fortalece mis creencias.. 🤗
Muchas gracias, Monica, por tu comentario.
Asumir la responsabilidad de nuestras emociones, sean éstas cuáles sean, es el camino para lograr la paz interior.
Solo cuando dejamos de proyectar en el otro la causa de nuestro dolor podemos tomar la riendas de nuestra vida y vivir el amor desde la libertad y el verdadero compromiso.
Un sentido abrazo.
Cómo hago para perdonarme, perdonar lo que viví, y perdonar mi pasado?
Gracias, Gisel, por tu pregunta.
Tal vez puede ayudarte este artículo del Blog
https://franciscojaviergutierrez.com/como-puedes-perdonarte-cuando-sientes-rabia/
Al final del post puedes descargar un ejercicio para practicar el perdón transpersonal.
Un sentido abrazo
Hola Francisco, realmente este post me ha ayudado y confirma lo que estoy pasando con mi pareja,el último año hemos tenido muchas discusiones y todo el tiempo pensé que él sacaba lo peor de mí, pero ahora, empezé a reconocer que soy yo la que tiene que trabajar en mis propios conflictos internos en la inseguridad, co-dependencia,orgullo y rencor,justo hoy he tenido una conversación profunda con mi pareja y me hizo ver cómo la lastimó con mi actitud y mis episodios de ira, este post me ayuda a darme cuenta que debo trabajar mucho en reconocer mis sombras y domar a ese dragón negro, muchas gracias
Muchas gracias, Paola, por compartir tu experiencia.
Me ayuda mucho saber que el artículo te ha ayudado a comprender que cuando abrazamos nuestras sombras estamos abrazándonos a nosotros mismos.
En eso consiste precisamente el proceso de sanar nuestra autoestima: en reconocer a ese dragón negro, aprender a amarlo e integrarlo como una parte de nosotros que surge con una intención positiva, una intención de cuidado y protección internas.
Un sentido abrazo,