Para transformar la exigencia hacia nuestra pareja, la Comunicación No Violenta nos propone un camino de 5 pasos.
- El primer paso consiste en darme cuenta de que estoy exigiendo.
- El segundo paso es preguntarme qué es lo que estoy exigiendo.
- En el tercer paso pongo mi atención en mis necesidades no satisfechas.
- El cuarto paso consiste en hacerme consciente de mis sentimientos
- Y en el último paso defino acciones concretas para satisfacer esas necesidades.
El último paso es el más importante porque cuando creo una lista de acciones para satisfacer mis necesidades la exigencia desaparece.
Si una vez que he llegado al paso nº 5 me doy cuenta de que me resulta difícil cuidar de mis necesidades puedo hacerme una pregunta sencilla ¿cuántos años tengo?
A menudo nos comportamos como niños que esperan que sea la pareja la que se ocupe de nuestras necesidades. Antes se lo pedíamos a mamá y a papá y ahora se lo pedimos a la pareja.
¿En qué edad emocional estoy cuando no cuido de mis necesidades?
Cuando ponemos acciones para cuidar nuestras necesidades pasamos a ser personas adultas y libres. Abandonamos el yo niño y el yo padre para colocarnos en el yo adulto.
Por lo tanto, las acciones reflejan el poder y la libertad del adulto que soy.
La finalidad de la relación es trabajar juntos para necesitarnos cada vez menos.
La finalidad de la relación es llevar a nuestra mente más allá de la idea limitada que tenemos de nosotros mismos.
Por lo tanto, la finalidad de la relación de pareja es crear la más elevada experiencia de nosotros mismos.
Es decir, estamos en pareja para lograr nuestra autorrealización y nuestra plenitud.
Ocurre que depositamos en la relación de pareja la función de crear el concepto más elevado del otro, pues creemos que es el otro quien va lograr que nosotros alcancemos nuestra plenitud y nuestra felicidad.
Esta es la causa del fracaso de las relaciones.
No necesitamos a nadie para darnos el sustento emocional que necesitamos como seres humanos. Porque la naturaleza humana está diseñada para que podamos darnos a nosotros mismos aquello que necesitamos.
El mayor bien para el otro es el mayor bien para uno mismo. Cuando estás en el Yo Esencial puedes expandir el amor que eres en esencia. Porque el amor no puede darse ni recibirse. El amor solo puede compartirse y expandirse.
Como dice UCDM tu propósito no es buscar el amor sino eliminar las barreras que has levantado para protegerte de él.
Hola Javier!
Acabo de llegar a esta parte de tu página y el vídeo arriba veo que ya no existe, hay alguna forma de poder verlo? Me interesa mucho pues yo exijo con reproches y estoy alejando a mi pareja hasta tal punto que me ha pedido tiempo para pensarlo, ha sido una relación muy complicada desde casi el principio y yo sé que tengo un miedo de abandono, rechazo y el es inseguro también. He estado en terapia y la verdad es que no he tenido herramientas, pero lo que tengo es muchas ganas de aprender y mejorar, pero no doy con la terapia apropiada. Alguna me dice que deje la relación porque es tóxica, pero también sé que me despierta mis heridas y es ahí donde puedo empezar a mejorar. Y la verdad es que cada vez que reprocho después me siento mal conmigo, ya que yo cuando me viene la emoción la evado chillando y/o reprochando al otro.
Un saudo y gracias.
Gracias, Elia, por compartirme tu experiencia.
El vídeo estaba alojado en Mindalia y debido al cierre del canal ya no se puede acceder a él. Espero que puedan publicarlo de nuevo en breve.
Como tú dices, nuestra pareja despierta nuestras heridas y activa nuestras creencias inconscientes acerca del amor.
En esta entrevista que no puedes ves hablé de cómo la Comunicación No Violenta nos ayuda a transformar nuestra exigencia en amor.
La exigencia y la ira nos habla de necesidades no satisfechas. Ese es el sorprendente propósito de la rabia, avisarnos de necesidades que no estamos satisfaciendo por nosotros mismos y que exigimos a la pareja que lo haga por nosotros.
Un sentido abrazo
Bastante interesante y oportuna tu enseñanza. Estoy exigiendo. Además porque creo que estoy en lo correcto. Intento no hacerlo, pero el ‘deber ser’ desde mi punto de vista, me gana. Por lo menos ya soy consciente de que lo hago, ahora a trabajar en los siguientes puntos. Uff, tarea para unos dos meses. Me convertí en la cuidadora de su padre y pareciera que me interesara más a mí que a él su bienestar. Como es su padre, pues exijo. Siempre termina en discusión. Gracias por hacerme ver.
Gracias, Alexandra, por compartir tu experiencia.
Para dejar de exigir es preciso primero que reconozcamos el propósito oculto que tiene la exigencia.
Puedes preguntarte ¿Qué necesidad mía estoy satisfaciendo cuando me ocupo de su padre?
A menudo olvidamos que es imposible ocupar el lugar «hijo de su padre» de nuestra pareja.
Es arrogante creer que sabemos qué es lo mejor para los padres de nuestra pareja, ya que estamos usurpando el papel que les corresponde como hijos.
Podrás estar, o no, de acuerdo con lo que él hace como hijo, pero no puedes ocupar un lugar que solo le corresponde a él en la relación con su padre.
¿Qué es lo que ganas para ti (y no para él) cuando haces eso?
Un sentido abrazo.
Muchas gracias!! Estoy aprendiendo algo trascendental en mí vida gracias a usted. Desde Argentina un fuerte abrazo!!
Muchas gracias, Silvina, por tu bello comentario.
Me ayuda mucho saber que te he podido ayudarte.
Un sentido abrazo.